MICHELLE LOBROT, FRANCISCO FERRER I GUARDIA, GERARD MENDEL, LOUIS ALTHUSSER.









MICHELLE LOBROT





A principios de este siglo, pensadores interesados por la pedagogía -Dewey, María Montessori, Decroly, Ferriére, etc.-creyeron descubrir una nueva ley de Aprendizaje, que ya había sido vislumbrada por Rousseau, Pestalozzi y otros. Para Ellos, un sujeto que aprende sólo pueden realizar adquisiciones, desarrollar Capacidades y saberes en el placer, es decir en un contexto de libre elección y Autonomía. Este principio se oponía a la práctica, notablemente analizada por. Marrou en su libro Histoire de I 'éducation dans l 'antiquité''', práctica basada en la imposición y la amenaza de sanciones, instalada desde siglos atrás en familias y escuelas. Esta idea era revolucionaria y creó métodos totalmente nuevos, como los métodos activos, la pedagogía Freinet, la pedagogía institucional, etc. 

Lamentablemente, ésta se vio comprometida por el fenómeno de masificación, surgido aproximadamente en la misma época como consecuencia de la generalización de la enseñanza, de su extensión a edades cada vez más avanzadas, aún a toda la vida y de la increíble multiplicación de los efectivos escolares y universitarios. Este crecimiento cuantitativo dificultaba las experimentaciones y las tentativas necesarias para la invención de una nueva pedagogía. En los años 60, luego de algunos avances espectaculares y prometedores, esta ley fue sustituida por otras preocupaciones. De regreso al problema.

Hoy en día, surgen inquietudes con respecto al interés que los chicos pueden tener por la escuela, se trata de comprender la inclinación de esta última hacia la violencia, los métodos, que había suscitado el entusiasmo hace un tiempo, son criticados por investigadores desinteresados que tratan de medir sus efectos. Es entonces necesario replantearse el problema planteado por los pensadores de comienzos de siglo: ¿Cuál es el contexto más favorable para aprender? ¿El aprendizaje se realiza de la misma manera que el trabajo, es decir con la imposición y la obligación? ¿Qué lugar hay que otorgarle al placer en el aprendizaje?

Para resolver este problema de una manera lo más científica posible, es importante contar con una metodología. La más utilizada hasta el momento da cuenta de lo que se llamó "defectología", que consiste en partir de las deficiencias y trastornos para tratar de formular leyes. Por ejemplo, se parte de chicos que fracasan en los aprendizajes escolares y se trata de descubrir cuáles son los factores que pueden explicar dichos fracasos. Lamentablemente, este método no puede arrojar los resultados que se esperan de él.

El fracaso, de una manera general, como la deficiencia y la carencia, puede resultar de una multitud de causas, ya que basta con una sola causa o condición ausente para que se produzca. Basta, por ejemplo, con que un chico no sea ayudado en la casa para que fracase. A partir de esto no podemos llegar a una conclusión que explique un fenómeno determinado, como el aprendizaje. ¿Del hecho que un chico que no cuenta con ayuda o que vive en una familia agitada fracasa en la escuela, se puede inferir que el chico que tiene éxito llega a este resultado porque es ayudado en su casa o vive en una familia tranquila? Evidentemente no. Los factores que explican la ausencia de algo no son los mismos que explican su presencia. Esta observación capital se aplica también a la teoría de la "selección natural" de Darwin, que' explica perfectamente por qué hay especies que desaparecieron, pero no por qué aparecieron. Una especie no existe sólo porque no desapareció, aún si no su desaparición es una condición de su existencia.

Existen dos procesos específicos que hacen aparecer y nacer las cosas, incluidos los órganos que les permiten defenderse. Son procesos que hay que descubrir. Volviendo a la pedagogía, propongo llamar "perfectología" al método completamente inverso al método tradicional. Este método consiste precisamente en tratar de explicar por qué los sujetos exitosos en los aprendizajes

La "Pedagogía Institucional".

Lobrot, psicopedagogo
Analista social, se caracteriza por un análisis permanente de las instituciones externas al grupo educativo y de las instituciones internas del grupo. Mediante el análisis de las Instituciones externas, el grupo puede llegar a definir cuál es el margen de libertad interna de la que dispone para organizarse, gobernarse, controlarse y evaluarse. Más todavía como que la organización no garantiza el funcionamiento interno el autoanálisis de las instituciones internas forman un nuevo campo de experimentación y aprendizaje. 

Michel Lobrot, intenta definir cuál es el tipo de actuación del educador que permitiría un funcionamiento adecuado a estas finalidades, señalando varios tipos de intervención. - Abstenerse de intervenir a nivel de análisis para no interferir el análisis de los educandos. - A nivel de organización práctica, limitarse a hacer propuestas. - A nivel de contenidos, y solo cuando se lo demanden, aportar ideas intentar aclarar, sintetizar, etc.

CONCEPTOS DE LA PEDAGOGÍA INSTITUCIONAL

AUTOGESTIÓN: actividad que lleva a un individuo a tomar sus propias decisiones, a elaborar la organización de su trabajo y los objetivos que desea cumplir.

AUTOGESTIÓN PEDAGÓGICA: se define como el conjunto de actividades de un grupo.

GRUPO DIAGNOSTICO: es la herramienta utilizable para el logro de la formación de las relaciones humanas llevado a cabo en grupos de 10 a15 participantes bajo la dirección de un monitor especializado.

Ahora hablaremos como concibe Michael Lobrot al alumno, al maestro
Maestro: Es un consultor al servicio del grupo a cuál se le pueden hacer preguntas sobre métodos, organización y contenido, aquí el renuncia a su autoridad, al poder y se limita a obtener sus servicios.

Alumno: Es un ser libre de tomar sus propias decisiones y analizar sus propias intervenciones. En esta pedagogía son críticos, analíticos y reflexivos





     FRANCISCO FERRER I GUARDIA
El proyecto fundamental de la vida de Francisco Ferrer Guardia es la Escuela Moderna, abierta en Barcelona, en la calle Bailén, en el número 56, a partir de 1901. "Se llevará a cabo una enseñanza inspirada en el libre pensamiento, mediante la práctica de la coeducación de sexos y de clases sociales, la insistencia en la necesidad de la higiene personal y social, el rechazo a los exámenes y todo sistema de premios y castigos, y la apertura de la escuela a las dinámicas de la vida social y laboral, y con la organización de actividades de descubrimiento del medio natural. Los niños y niñas tendrán una insólita libertad, harán juegos y ejercicios al aire libre, y uno de los ejes del aprendizaje lo constituirán sus propias redacciones y comentarios de estas vivencias. Una rotura verdaderamente revolucionaria con los métodos tradicionales.

En la Escuela Moderna se organizarán conferencias dominicales, entendidas como una extensión educativa para las familias, contando con el apoyo y la intervención de personajes como Odón de Buen o Santiago Ramón y Cajal, de un prestigio científico universal.

La sensibilidad pedagógica se vinculará con el ideal de emancipación del género humano, propio de las corrientes libertarias hacia los cuales irá derivando el compromiso político de Francisco Ferrer Guardia. Será un ejemplo rotundo de la estrecha relación que el pensamiento anarquista mantendrá con el horizonte de una enseñanza renovada, considerada como vía fundamental para acceder a la liberación del individuo de cualquier sometimiento.

En la propuesta educativa de Ferrer, la escuela se concibe como un escenario libre de jerarquías, donde el profesor es un compañero y las prácticas autoritarias y el verticalismo, la religión y sus dogmas, son desterrados de la convivencia y las tareas educativas. Para Ferrer, la educación liberadora es aquella donde la escuela contempla una “enseñanza racional y científica [que] ha de persuadir a los futuros hombres y mujeres que no han de esperar nada de ningún ser privilegiado (ficticio o real), y que pueden esperar todo lo racional de sí mismos y de la solidaridad libremente organizada”, (…) Donde “los niños y niñas lleguen a ser personas instruidas, verídicas, justas y libres de todo prejuicio. Para ellos, sustituirá el estudio dogmático por el razonado de las ciencias naturales.” (La Escuela Moderna).

La Escuela Moderna presenta al profesor como un facilitador de elementos libertarios para el aprendizaje en solidaridad, donde a las niñas y niños se les alienta a la reflexión, pero a la vez se les otorga sin complejos respuestas claras desde la ciencia y el antiautoritarismo, estimulando el pensamiento crítico contra los dogmas religiosos, el nacionalismo y el militarismo; Ferrer es consciente de que en las tareas del control social del capitalismo, las instituciones lejos de abandonar la enseñanza de doctrinas autoritarias, lo que han hecho es reemplazar las figuras religiosas por los valores ciudadanistas y patriotas, con tal de seguir inculcando a través del sistema educativo enseñanzas en función de los intereses del Poder, facilitando de este modo la dominación social: "Dios era reemplazado por el Estado, la virtud cristiana por el deber cívico, la religión por el patriotismo.”(ibíd.)
Ferrer i Guardia pretende fomentar la evolución progresiva de la infancia, evitando los dogmas, sistemas y “moldes que reducen la vitalidad a la estrechez de las exigencias de una sociedad transitoria que aspira a definitiva; soluciones comprobadas por los hechos, teorías aceptadas por la razón, verdades confirmadas por la evidencia, eso es lo que constituye nuestra enseñanza, encaminada a que cada cerebro sea el motor de una voluntad, y a que las verdades brillen por sí en abstracto, arraiguen en todo entendimiento y, aplicadas a la práctica, beneficien a la humanidad sin exclusiones indignas ni exclusivismos repugnantes.”

                                   


GERARD MENDEL
Estudiar el fenómeno educativo desde el pensamiento del sociopsicoanálisis. Expone la trayectoria vital de Gérard Mendel, el fundador del psicoanálisis y explica su perspectiva psicoanalítica y antropológica; analiza la fundamentación teórica, los conceptos y metodología seguida por Gérard Mendel; estudia las investigaciones más importantes que hacen referencia a la educación; examina los principios de la escuela socialista, y ofrece una síntesis valorativa del proyecto educativo del sociopsicoanálisis.

1) El fenómeno educativo no puede ser presentado como un fenómeno individual o simplemente intrapsíquico, sino que se inscribe en una doble vertiente intrapsíquica y sociocultural relacionada por tanto con la intrahistoria y la sociohistoria de la persona. Los problemas fundamentales de la educación no son por tanto sólo problemas pedagógicos, sino que trascienden el ámbito de lo estrictamente pedagógico. Una reflexión y acción educativa deben tener en cuenta los aspectos específicos del psiquismo humano y las interrelaciones con el contexto sociocultural.

2) La educación como fenómeno inscrito en lo sociocultural está sometida a los fenómenos de la crisis de civilización. El sociopsicoanálisis analiza en profundidad esta crisis de civilización actual sometida a los conflictos inconscientes del alma colectiva que se viven a un nivel de las instituciones socioculturales y del poder social. Crisis que encuentra su expresión en una situación de regresión del yo a partir de la escuela primaria, la destrucción del ideal del yo postedipiano y la infantilización permanente del individuo sometido al poder social cada vez más fuerte y en el que se encuentran mezclados los rasgos maternos y los rasgos paternos.

Este estado de crisis y regresión provoca un estado de agresividad difícilmente asumible. La superación del conflicto en el plano sociopsicológico solo se puede realizar a partir de la sola identificación individual con el padre. Todos los personajes exteriores, todos los padres sociales, han perdido el aspecto ideal ya que están sometidos al ideal tecnológico. No hay más imagen paterna ideal en el universo visible que la que existe en el yo individual sano.

3) El problema de la educación es un problema político, en el sentido amplio del término. Frente a una cultura dominante que tiende a favorecer el apoliticismo, a reprimir la relación del problema pedagógico con el sistema social, haciéndolo simple cuestión psicológica, el sociopsicoanálisis opta por una opción política que intenta una educación liberadora. Rechaza la institucionalización de la dominación que presenta el sistema capitalista en el plano económico, político, cultural y religioso, y ofrece una alternativa socialista no autoritaria centrada en la libertad, en la responsabilidad, en la realización de sí en función de una iniciativa personal u colectiva, en la creación de nuevos valores que intentan transformar la realidad existente y permitir el desarrollo de la especificidad humana en todos sus campos.

4) El sociopsicoanálisis inscribe su proyecto educativo en una perspectiva no autoritaria. Este rechazo del fenómeno autoridad no es una decisión sin más, sino el fruto de una reflexión sobre esta actitud y las implicaciones que tienen para lo educativo.

 El sociopsicoanálisis propone un proceso de racionalidad verdadera que no solamente aligera las presiones del mundo externo o interno, sino que también permite proseguir el proceso de especificidad humana que a nivel sociopsicoanalítico está representado por el deseo de libertad del individuo, emanación del ideal del yo postedipiano frente al que se opone el otro deseo humano de seguridad, vivido en la dependencia. El modelo educativo que propugna el sociopsicoanálisis pasa por este proceso de racionalización que se opone tanto al esquema nihilista y destructor de los valores de la civilización como a los totalitarismos de cualquier signo. El hombre solo progresa en la libertad y responsabilidad. El proceso educativo debe favorecer esta creatividad responsable, la cual no se realiza en el aire, sino mediante las transformaciones socioculturales.

                     
 LOUIS ALTHUSSER
La ruptura epistemológica
Althusser pensaba que las ideas de Marx habían sido malentendidas, especialmente por los marxistas. Consideraba que varias formas de interpretar a Marx (el historicismo, el idealismo, el economicismo, el humanismo, etc.), no hacían justicia al carácter científico de los trabajos de Marx a partir de 1845. Frente a la idea de que toda la obra de Marx se podía entender como un todo consistente, Althusser argumentó que hubo una ruptura epistemológica (concepto que toma de Gaston Bachelard, Pierre Bourdieu, Jean Claude Passeron y Jean Claude Chamboredon) a partir del momento en que Marx se concentró en sus trabajos económicos. Además consideraba que se perdía la especificidad y la fuerza del conocimiento científico si se "complementaba" al Marx maduro con nociones extraídas de sus escritos de juventud o de obras de F. Engels. Aunque los primeros trabajos de Marx están vinculados a las categorías filosóficas hegelianasy a la economía política clásica, con La ideología alemana (escrita en 1845) se habría producido una ruptura repentina y sin precedentes que prepara el camino para sus trabajos posteriores. El problema se complica por el hecho de que Marx no reflexionó en el papel sobre ese giro, y solo lo comunicó oblicuamente. Este giro se puede apreciar solo mediante una lectura crítica cuidadosa, o mediante otras operaciones, como la que hizo Althusser al editar a Feuerbach traducido al francés y mostrar que muchos de los párrafos de los cuadernos de trabajo de Marx que los marxistas humanistas glosaban, no eran sino transcripciones de Feuerbach que Marx hacía para su uso personal. El proyecto de Althusser era rescatar el poder y originalidad de la teoría de Marx para el avance del conocimiento científico de la sociedad (lo que él denominaba "el continente historia descubierto por Marx") y, a partir de ese conocimiento, poder ofrecer al movimiento comunista internacional elementos para orientar la acción política.

FILOSOFÍA
Otros trabajos de Althusser incluyen el volumen colectivo Para leer El Capital (en francés: Lire Le capital 1965), el cual consiste en un intenso trabajo de relectura, en clave estructuralista, de El Capital, la obra más importante de Karl Marx. En su edición española el libro está dividido en dos partes; en la primera de ellas Althusser realiza una fuerte crítica a la lectura de El Capital de forma empirista, y en general, a toda forma de empirismo que ataque las ciencias. En la segunda parte Tiene Balidar e analizar el objeto teórico de El Capital y la teoría de la transición de una sociedad a otra que hay allí.En la recopilación de ensayos La revolución teórica de Marx (en francés: Pour Marx 1965), Althusser intenta establecer una periodización estricta de la obra de Marx, separando al Marx maduro, "marxista", del Marx de juventud, aún bajo la fuerte influencia idealista de Hegel yFeuerbach. Esta periodización ha sido sometida a fuertes críticas por el pensamiento marxista posterior, que ha intentado revalorizar el pensamiento político del primer Marx.Quizá la tesis central de toda la filosofía de Althusser es que la historia es un proceso sin sujeto ni fines cuyo motor son las fuerzas productivas (y la lucha de clases determinada por ellas). La historia no tiene sentido. Para Althusser todos somos sujetos, y en calidad de éstos, marionetas de la historia, pero esta historia no es movida por alguien, lo que desemboca en su famosa tesis de que todos somos marionetas de algo que no va a ningún lado, de algo sin sentido.Otra famosa tesis de Althusser en filosofía es que, al contrario de lo que comúnmente se piensa, la filosofía siempre viene después de la ciencia. Esta tesis rechaza que la filosofía haya sido la madre de todas las ciencias, sino que, más bien, la filosofía es la hija de las ciencias. Esto quiere decir, la filosofía no es una ciencia, sino una reacción a las ciencias en el campo teórico. De esta forma, la matemática (Tales de Mileto) engendró la filosofía de Platón, la física (Galileo) engendró la filosofía de Descartes, la ciencia de la historia (Marx) engendró su propia filosofía y el psicoanálisis (Freud) comienza hasta ahora a engendrar su propia filosofía.Lo interesante de este proceso es que la filosofía marxista, engendrada por la ciencia de la historia es, para Althusser, "correcta", (no verdadera, pues la filosofía no dice verdades, no es una ciencia, sino una ideología), esto quiere decir, la filosofía se ubica correctamente en posiciones que defiendan a las ciencias ya que la ciencia de la historia le permite el conocimiento científico de la producción filosófica e ideológica, le permite, el conocimiento científico de la producción de sí misma. En esto consiste "la inmensa revolución teórica de Marx".Menos conocidos son sus trabajos sobre Maquiavelo, Spinoza, Montesquieu y Rousseau.Algunos de los estudiantes y camaradas de Althusser llegaron a ser posteriormente intelectuales eminentes: Jacques Derrida, Michel Foucault, Etienne Balibar, Alain Badiou,Marta Harnecker, Jacques Rancière, Pierre Macherey, Saul Karsz y Bruno Sandstede.

Obras de Louis Althusser
La revolución teórica de Marx. México: Siglo XXI. 1967. ISBN 968-23-0166-1.
Sobre el trabajo teórico: dificultades y recursos. Anagrama. 1967. B. 30296-1970.
Montesquieu: la política y la historia. Barcelona: Ariel. 1968. ISBN 84-344-0749-3.
Para leer El capital. México: Siglo XXI. 1969. ISBN 968-23-0319-2.
Lenin y la filosofía. México: Era. 1970.
Seis iniciativas comunistas. Madrid: Siglo XXI. 1977. ISBN 84-323-0289-9.
Lo que no puede durar en el Partido Comunista. Madrid: Siglo XXI. 1978. ISBN 84-323-0316-X.
Para un materialismo aleatorio. Madrid: Arena. 2002. ISBN 84-95897-01-6.
Marx dentro de sus límites. Madrid: Akal. 2003. ISBN 84-460-1992-2.
Ideología y aparatos ideológicos de estado / Freud y Lacan. Buenos Aires: Nueva Visión. 2003. ISBN 950-602-032-9.
Maquiavelo y nosotros. Madrid: Acal. 2004. ISBN 84-460-1993-0.

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